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¿El streamer Jacky rompe sus propias normas?
No ha pasado ni una semana de la expulsión del youtuber Javi Oliveira y su personaje de la serie London Eye y Jacky ya se encuentra en el medio de otra polémica. Y lo peor es que lo que supuestamente hizo, muchos lo consideran como una conducta tóxica dentro de la serie. En menos de una semana, el streamer ha sido acusado de romper con dos de las normas de la serie.
Primera norma
Una de ellas señala que el streamer tiene la responsabilidad de erradicar cualquier tipo de toxicidad hacia otros compañeros de la plataforma y de la serie. Al parecer, CooLifeGame ya incumplió dicha norma. Hace apenas unos días, el streamer se burló, durante uno de los directos de la serie, de las denuncias del youtuber Dalas Review. Y, tal vez Dalas no es un participante de la serie, pero sí es un colega de la plataforma. ¿Acaso burlarse en directo de las denuncias de un compañero de la plataforma no cuenta como comportamiento tóxico?
Segunda norma
Otra de las normas señala que se deben evitar pequeños comentarios que dan a entender la indignación del streamer de cara a un rol en específico.
Básicamente, Jacky criticó en uno de sus directos al rol del streamer Perxitaa. CooLifeGame señaló que el personaje de Perxitaa tiene demasiados problemas, demasiada historia detrás y era difícil seguirlo. Por este motivo, el streamer cree más conveniente que Perxitaa jugara con otro personaje porque estaba afectando a los demás roles. Básicamente, ha hecho comentarios que dieron a entender su indignación de cara al rol del Perxitaa.
Reacciones a la conducta de Jacky.
Muchos han opinado sobre los comentarios de Jacky y algunos lo ven como una falta de respeto, pues habló del rol de otro creador y de cómo lo maneja en uno de sus directos. Y encima le recomienda que juegue con otro personaje.
Perxitaa ha invertido muchas horas de trabajo y esfuerzo para desarrollar la historia de su personaje Carlo. Y muchos alegan que todo el descontento de Jacky ha sido porque no se ha visto la trama de Carlo en la serie “Infames” que continuó con su historia después de lo acontecido en Marbella.
Claramente, Jacky no vio la serie de Infames y tampoco se comunicó con Perxita, por lo cual éste todavía pensaba que Carlo era buscado por la Interpol. Pero en Infames, Carlo cumplió su condena e incluso colaboró con el FBI.
Auron y Jacky no estaban al tanto de todo esto y sus personajes estaban jugando en base a algo que ya pasó en otra serie.
Lo que muchos critican es que de eso precisamente se tratan los juegos de roleo. La idea es improvisar sobre la marcha y adaptarse a las acciones de los otros personajes. En este tipo de juegos no todo tiene que estar pactado previamente.
En pocas palabras, en menos de una semana, el streamer podría haber roto dos de sus propias reglas. Y, recordemos, que la administración justificó la expulsión de unos de los jugadores basándose en un supuesto incumplimiento de esas mismas normas.
Jacky y Perxitaa se responden a la polémica
CooLifeGames argumenta que han malinterpretado sus comentarios. Su intención es que todos comprendan el contexto de los personajes. Según él, la historia del personaje de Perxitaa es demasiado compleja para que “lo pase bien”.
Además, añade que todo lo que dijo fue sacado de contexto y él sólo está intentando hacer su trabajo. Jacky se queja de que cada cosa que dice lo ven como algo “malo”. Muchos han notado cierta hipocresía en estas palabras, pues podríamos decir que lo mismo pasa con los youtubers de salseo. Todos piensan negativamente de ellos cada vez que hablan acerca de un tema.
Desde entonces, Perxitaa señaló que ya habló con Jacky por el chat de Discord. El streamer afirma que le pareció mal que hablara del rol de otra persona en uno de sus directos. Y, sobre todo, que hablara del personaje sin entender el contexto y sin haber hablado primero con él.
Sin embargo, lo que resulta muy injusto es que hayan recurrido a expulsar a un jugador que aún no había infringido ninguna norma ni causado la muy temida “toxicidad” pero no se le amonesta ni echa a otro jugador que ya ha generado un ambiente poco “amigable” en menos de siete días.
