Tras los diez días de confinamiento por covid comienzan las visitas y la primera y única hasta ahora ha sido su madre Silvia Bronchalo, quien llegaba directamente a la cárcel donde se encuentra su hijo imputado por el asesinato y descuartizamiento del cirujano plástico colombiano Edwin Arrieta.
Silvia llegaba con semblante serio y cabizbaja acompañada por un representante de la embajada española en Tailandia, el dolor de esta madre está conmocionando a la prensa española que ha querido respetar este primer día de visita poniéndose de acuerdo para no acercarse ningún medio de comunicación para hacer ningún tipo de pregunta.
Además de los periodistas trasladados a Tailandia, aquí en España son también muchos los que quieren empatizar con Silvia Bronchalo, entre ellos Ángela Portero y lo hace a través de sus redes sociales compartiendo el vídeo de este terrible momento con un triste mensaje: “No quiero imaginarme en semejante situación. Un hijo es un hijo siempre. Qué horror!”.