Rocío Carrasco se reunió con Alba Carrillo y Nagore Robles en el podcast de Mtmad, en donde hablaron de todo un poco.
Carrasco confesó en el podcast que solo había tenido que reinventarse una vez en su vida y que fue muy “heavy”. Rocío agregó que espera no tener que reinventarse nunca más. Pero lo más interesante fue cuando le preguntaron si era feliz. “Pues mira yo, hoy por hoy, me ha costado. Bueno siempre hay una parte…yo no te puedo decir que sea feliz porque hay cosas que no las voy a poder cambiar y que tendré que acostumbrarme a vivir de esa forma pero sí es verdad que ha habido una parte que se va convirtiendo en felicidad o que te va dejando camino a que puedas ser feliz”, confesó la hija de Rocío Jurado. Nagore señala que eso estaba muy bien y Carrasco responde: “Sí, era necesario“.
En la entrevista hablan de los cambios de look de Rocío, Alba le sigue tirando pullas a Jorge Pérez, Rocío queda en presentarle un amigo a Alba y pintan a Fidel Albiac como un ángel caído del cielo. “Le amo. Es algo que debería ser para todo el universo. Es buen tío, es divertido, es guay, se preocupa por las personas…”, confiesa Alba Carrillo de Albiac. “Es más listo que el hambre“, agrega Nagore. Carrillo añade que siempre que tiene un problema, el primero que le escribe es Fidel. “A mí me encanta él, entero“, señala Carrasco, la cual no puede decir ni una cosa que le molesta de él, a parte de que es madrugador.
“Es un tío súper equitativo“, alcanza a decir Rocío sobre Fidel antes de que Alba le advierta que se lo va a llevar a su casa. “Yo te lo presto“, le asegura Rocío. Nagore señala que ahora Fidel está más bueno que nunca pero que no siempre fue así. “Todos tenemos un pasado, lo que pasa es que mi marido es como el vino, según va pasando el tiempo, más bueno se va poniendo, va a mejor“, declara Rocío.
